Médico de Mi Provincia. Juan Antonio Vicuña

03 de Julio de 201810:36

El doctor Juan Antonio Vicuña es médico federado del Círculo Médico de Carlos Casares. Si bien nació el 7 de octubre de 1946 en Lomas de Zamora, a los pocos días ya estaba viviendo en Dudignac, partido de 9 de Julio, donde su padre trabajó como médico durante 35 años.

 

“Viví ahí hasta los once años, donde fui a la escuela Nº 15. Después me mudé a Llavallol e hice la secundaria en el Colegio Euskal-Echea como pupilo. Tuve de compañeros, entre otros, a Horacio García Belsunce (hermano María Marta) y a Eduardo Valentín Suárez (hijo de Valentín, que fuera presidente de AFA y de Banfield). En esa época me hice fanático del “Taladro”, el Club Atlético Banfield. Hasta el día de hoy disfruto del regalo de la vida que es seguir manteniendo contacto con aquellos compañeros de la escuela primaria a través de un grupo de whatsapp, y ocasionalmente nos reunimos”.
 
“Volvía de vacaciones a Dudignac todos los veranos, y entre los 15 y 18 años aprovechaba para hacerme unos pesos trabajando en la cosecha de trigo. Cargaba bolsas de 70 kilos y las subíamos a los acoplados de los camiones. Generalmente trabajaba unos 15 días y con lo que ganaba me iba un mes a Mar del Plata”.
 
¿Porqué decidió ser pediatra?
Cuando hice el internado rotatorio ya estaba decidido a dedicarme a la Pediatría, por lo que repetí la rotación en la ex Casa Cuna. Hice la residencia de Pediatría en el Hospital Alejandro Posadas, en ese momento la coordinaba el doctor Horacio Toccalino, conocido mundialmente por sus trabajos sobre celiaquía, siendo parte del servicio el doctor Parral, gran conocedor de medio interno y la doctora Margarita Ramonet, patóloga y Presidenta de la Sociedad Argentina de Pediatría hasta hace muy poco tiempo.
 
¿Y antes de eso?
Cuando terminé el segundo añoentré como practicante en la guardia del Instituto de Cirugía de Haedo. Ahí aprendí a hacer yesos y suturas y hasta nos permitían ayudar en operaciones y anestesias. En esos años trabajé como ayudante rentado de la cátedra de Fisiología cuyo titular era el doctor Aramendía. Seguí en la guardia de ese instituto hasta que me recibí de médico en 1973. Nunca me olvidaré de esa guardia, cuyo jefe era el doctor Tesaire, donde terminé como practicante mayor. Debo recordar aquí que nuestra promoción fue la primera que no requirió dar un examen en la UBA para revalidar el título.
 
¿Cómo fueron esos años?
Fueron muy intensos, mucho viaje desde la capital, en colectivo, tren y otro colectivo, tres guardias por semana, pero la recompensa era grande. Veíamos  a diario al doctor Daniel Stamboulian que ya sobresalía en Infectología y al doctor Horacio Repetto, reconocido nefrólogo, entre muchos otros que fueron sobresalientes. Cuando estaba en primer año de la Facultad de Medicina, año 1966, se produjo el golpe de estado que derrocó al Presidente UmbertoIllia, extraordinaria persona, médico cordobés, que tuvo que ceder a la fuerza su sillón al General Onganía. Al año siguiente hice el servicio militar en el área Aeronáutica.
 
¿Cómo fue su vida de colimba?
Me incorporé en los cuarteles de Junín, luego me trasladaron a la base de Morón, para terminar en Aeroparque, donde realizamos tres meses de una durísima instrucción. Al concluir la misma, el destino final fue el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas. Ahí tuve como compañero a Álvaro Alsogaray hijo, hermano de María Julia y sobrino del entonces comandante en jefe del ejército, General Julio Alsogaray.
 
¿De esas épocas tan difíciles le quedó algún hecho que lo marcó?
Recuerdo una madrugada de guardiaen Neonatología, mientras caminaba hacia el quirófano mirando hacia el parque por los ventanales, vi figuras que se movían entre los arbustos. Ese día el ejército tomó el Hospital. Ya había ocurrido el golpe que derrocó a Isabel Martínez de Perón y comenzaron meses de terror, hubo muchos desaparecidos, nos revisaban todos los días al entrar y no podías faltar ni con 40 grados de temperatura porque te iban a buscar a tu casa y podías pasarlo muy mal. Debo aquí reconocer el valor del doctor Toccalino, quien se responsabilizó por todos y cada uno de nosotros frente al jefe del operativo.
 
¿Cómo fueron sus comienzos en Carlos Casares?
Fueron difíciles,comencé a trabajar ad honorem en el Centro Materno Infantil, en el Hospital, donde se hacían partos y cesáreas, y también en el Sanatorio. El 2 de mayo de 1997 abrí mi consultorio de pediatría. Estaba casado con Graciela Devalle, también médica. Se agrandó la familia con nuestros hijos, y eso me obligó a trabajar más duro. Médico de guardia, Jefe de pediatría durante 11 años, Director del Hospital y por último Director del Centro Materno Infantil, hasta que me jubilé como tal hace tres años. No obstante, sigo haciendo guardias, atiendo las siete salitas rurales del partido desde hace más de diez años, el Centro de Atención Primaria Passerini y todas las tardes mi consultorio.
 
Cuando llegué a Casares el Círculo Médico no tenía local propio, funcionaba en una oficina del sanatorio. Fue el doctor Joaquín Schiavina el que tuvo la iniciativa de comprar una casa, donde funcionó durante algunos años, hasta que nos mudamos al actual, más cómodo y moderno. Hoy su hija, la doctora María Verónica Schiavina ocupa un cargo en la Mesa Ejecutiva de FEMEBA, habiendo sido además presidenta de nuestro Círculo.
 
El primer impacto visual en el lugar de la entrevista es el despliegue fotográfico de motos. Con entusiasmo relata que tiene una Yamaha 600, que le gusta mucho montarse en ella y viajar. “De esa forma recorrí todo el país, Chile y Uruguay. En ella visité muchas salitas rurales. En una de estas visitas, al pasar por una laguna vi una caravana de patitos. Como me gustan las aves (soy socio de aves argentinas), les saqué una foto con la que obtuve el tercer premio del concurso fotográfico de FEMEBA y esa foto salió en el almanaque de ese año”.
 
¿Con su moto sale solo o en grupo?
De las dos maneras, pero es mejor acompañado. Pertenezco a un grupo de motoqueros, soy el de mayor edad pero no tengo problema en seguirlos.
 
Otra foto, en este caso del padre Carlos Mujica, nos invita a preguntarle qué relación tuvo con él. “Lo tuve de profesor en la Universidad del Salvador. Fue un importante protagonista de ese momento de nuestra historia”.
 
¿Además de las motos que otras cosas le gustan?
Me interesa mantener los vínculos, los deportes y viajar.En cuanto a los vínculos, con mis compañeros de la facultad nos seguimos viendo y nos juntamos el último viernes de noviembre de cada año a cenar en algún lugar de Buenos Aires. En lo deportivo he participado de triatlones, pedestrismo, ciclismo y gomón, y me encanta el esquí. Y me mantengo relacionado con el deporte, ya que realicé la especialidad de Medicina Deportivay suelo ejercer en eventos de fútbol y rugby infantiles.
 
Otra cosa que disfruto mucho es viajar. A pesar de los momentos económicos difíciles que hemos pasado, en los últimos 15 años empecé a recorrer el mundo, con amigos, con mis hijos y con mis nietos (por ahora tengo tres y viene otra en camino). Uno de eso viajes fue al último mundial de Rugby en Inglaterra, y hace dos meses al mundial de moto GP en Río Hondo, al que por supuesto fuimos en moto.
 
Entre anécdotas que surgen durante la charla, menciona que hace un par de años estuvo en Cuba, donde hacía poco había estado el Papa Francisco.“Coincidí con el espectáculo gratuito que dieron los Rolling Stones, el primer festival de Música Tecno y al mes siguiente la visita del Presidente Obama. Visité entre otras ciudades de la Isla Trinidad, de calles coloniales empedradas similares al casco Histórico de Colonia en Uruguay y a la ciudad amurallada de Cartagena de Indias. En ese viaje me alojé en casas de familia y en Trinidad la casa pertenecía a un capitán retirado del ejército (buzo profesional) cuyo abuelo había sido custodio de Fidel Castro.Por las noches solíamos cenar lo que él pescaba en el día, nos convidaba un habano Cohiba y Ron Habana Club. En una de esas sobremesas nos mostró fotografías inéditas en las que está buceando junto con Fidel”.
 
Una vida intensa, rica en actividades y en contactos personales,“piel a piel”, como a él le gusta practicar la salud, es un poco el resumen que emerge tras la entrevista con el doctor Juan Antonio Vicuña.
 
César Mc Coubrey
Para FEMEBA HOY.
Edición Tomás Malato

RRHH banner
Agradecimiento a los Médicos
Revista Somos Medicos
Flicker
You Tube FEMEBA OFICIAL
Violencia
Nociones basicas
Normas Iram