“Nací en 1949 en Mercedes. Fui sorteando etapas, algunas difíciles como algún padecimiento sufrido en mi niñez y momentos de incertidumbre social como estudiante universitario de donde egresé en 1973. Finalizada mi carrera, hice el Servicio Militar Obligatorio en un regimiento de Artillería, Grupo I Gral. Iriarte, en Campo de Mayo. Supe de qué se tratar estar en combate y ver a mis espaldas como vuelan las esquirlas de las bombas. Todos recuerdos imborrables”, sostiene.



                                                   

Creo tener una gran vocación de servicio y esa necesidad de estar cerca del otro me llevó a ser Maestro Normal de Escuelas. Desde niño practiqué deportes y luego de rendir mis exámenes para recibirme de Bachiller ingresé a la facultad para estudiar medicina. En mis últimos años de estudio fui Practicante Menor y Mayor en el Instituto de Cirugía de Haedo con el profesor, doctor Luis Güemes. Luego fui residente de Ortopedia y Traumatología en ese Hospital con una formación propia del medio quirúrgico de ese tiempo y lugar, todo influyó a  conformar mi perfil dedicado a la especialidad que me llevó a recibirme como deportólogo, teniendo participación activa en la enseñanza, la cual sigo ejerciendo como un llamado especial y una respuesta positiva de mi parte, satisfecho por lo hecho hasta ahora. Me consideró un aprendiz, lo cual me impulsa a la lectura permanente y a preparar mis charlas con anticipación. No me gusta improvisar.

Practiqué natación. Competí en piletas cortas. Seguramente heredado de los vascos, hice ciclismo con todo el sacrificio de entrenarse en soledad para recibir luego el agradable sabor de la competencia. La pesca es otro de las descargas a tierra que aprendí desde muy pequeño y todavía practico. Pero en mi vida hubo otra actividad: el automovilismo de pista. Corrí más de 137 carreras, participando actualmente con la característica de velocidad controlada, y no a fondo como antes. En el año 2016 estuve en el Gran Premio 19 Capitales en Uruguay. Llegué en segundo lugar en la categoría TC con mi coupé Ford 1938, actualizada por supuesto; junto con mi hijo y colega, Rodrigo, nos acompañamos mutuamente en muchas de ellas.     
            

Eso dicen algunos amigos que me festejan las humoradas. Comencé haciendo teatro infantil en el colegio secundario. Más mis ansias de contar, también las llevé a cabo en veladas nocturnas en La Plata; es decir, en boliches de los que participábamos los jóvenes. Momentos donde la creatividad se ponía a prueba. Sin embargo, años después, con el doctor Carlos Bueno, ex consejero de la FEMEBA, se creó el grupo Medicalísima, con galenos de nuestra ciudad de Mercedes. Algunos exponían su arte, guitarra, canto, piano, violín, y teatro de comedias, siendo este último el rubro en que puse mi persona para hacer reír a los demás, haciendo de tano, peón rural, portero, policía, en fin, papeles que me reconfortaban el alma. Que junto a mi esposa Mita pudimos hacerlo y disfrutarlo plenamente por varios años.
                                   

¿Qué nos puede decir de su familia?
                                            

- Mita, es maestra Jardinera, jubilada y dirigente con responsabilidad en el ámbito nacional, me acompaña desde mi juventud. Tenemos 4 hijos: Rodrigo, médico traumatólogo; María Florencia, fonoaudióloga, María del Rosario, antropóloga y docente; María Eugenia, periodista, realizadora de cine y televisión, y estudiante de puericultura. Además mis siete soles, mis nietos: Chiara, Nicolás, Luca, Felipe, María Renata, Helena y Antonia.

-Reuniones familiares con mucho bullicio…         
  

Familiares y de las otras. Casa grande con corazón grande para acoger a todos los que vienen a ella. Me gusta cultivar la amistad como una necesidad de desarrollo personal y comunitario, perteneciendo a varios grupos de amigos, los de los “fierro”, los de teatro, los de la pesca, los colegas, los deportistas, los que participamos de la educación, la familia en particular, sin discusiones que mellen nuestros sentimientos y principios. Escuchar y dialogar es mi camino. 

Siendo la educación una de mis preferidas, convencido que debo ayudar a desarrollar al individuo como tal, la dirigencia no ha quedado de lado en mi vida. He cumplido varios roles en la sociedad, como ser presidente de la Asociación Médica de Mercedes; Consejero de FEMEBA; Vicepresidente y luego Secretario General del Colegio de Médicos, Distrito V; dirigente juvenil, responsable de organizaciones sociales diversas y hogares de tránsito entre otros.

Quizás. Aunque yo la catalogaría de simple. Organizada con el transcurso del tiempo, con expectativas permanentes y nuevos desafíos tanto personales, como familiares y sociales, dispuesto a dar respuesta a todo ello y con el enorme agradecimiento de disfrutar lo que hice y hago y de haber podido viajar por el mundo, mayormente con mi esposa y compañera de tantos años, sabiendo atesorar lo importante de las diversas culturas conocidas.