Estudió en la Universidad de Buenos Aires y se especializó en Tocoginecología en el Hospital Lucio Meléndez de Adrogué. “Después hice Ginecología y me metí en la parte de Endocrinología y Reproductiva. Lo último que hice, que me dedico a eso ahora, es Sexología. Hice un posgrado en el Hospital de Clínicas con el Dr. Kusnetzoff. Además tengo dos cargos públicos, soy médico interno de Ginecología en el Hospital de Adrogué y hago Atención Primaria en una sala del municipio de Almirante Brown”.

Merino comenta que los reclamos de los médicos de su entidad siempre pasaron por el tema económico. “Especialmente los honorarios de IOMA. Además existe la creencia de que todo lo que facturamos es para nosotros, que las autoridades nos llenamos de plata con esto. Y yo trabajo ad honorem en el círculo”.

Con respecto al recambio de profesionales, Merino dice que casi no hay médicos jóvenes involucrados en la parte gremial, y lo atribuye a la misma desconfianza hacia la entidad. “En la Comisión como mucho juntamos 4 o 5. Me llamó la atención en el Encuentro Provincial las distintas realidades que se enunciaron, que en el interior de la provincia los médicos se acercan al ámbito público y los dirigentes están preocupados por la falta de actividad privada. Acá es totalmente al revés, trabajan en privado y no facturan, trabajan en guardias o en ambulancias. Lo único que les importa a los médicos jóvenes es la plata”. Y agrega: “nuestra idea es captar más médicos pero en la medida que somos un círculo chico, tenemos poco para hacer. Como presidente me gustaría involucrarme en las residencias médicas para mejorar ciertas realidades que tenemos en el hospital, capacitar a los jóvenes, darles becas, pero la actualidad económica de la entidad me lo impide. Desde FEMEBA se está haciendo, pero los médicos se quejan de que hay que pagar la formación”.

Merino menciona que se dan frecuentemente situaciones de violencia contra profesionales en su entidad. “En el hospital estamos de paro por 72hs esta semana, en reclamo por mayores condiciones de seguridad, honorarios e infraestructura. Los hospitales están abandonados, no hay insumos, no tenemos funcionando el quirófano, no funciona la terapia pediátrica, el laboratorio volvió este mes a sacar sangre después de 3 meses. Es un tema político, el día que entiendan que los médicos se van del hospital porque no cobran va a cambiar todo, pero no hay políticas de salud ahora para modificar esto, así que el panorama es sombrío”.